FUERZA DE VOLUNTAD
Desde pequeños nuestros
padres nos enseñan hábitos, que van formando nuestra personalidad y desde ese
momento, empieza nuestro cerebro a guardar información que posteriormente van
hacer parte de nuestra vida y nos ayudaran a alcanzar nuestros proyectos,
logros y metas; el cerebro guarda información consciente e inconscientemente,
siendo un receptor; que si analizamos, es utilizado tan solo en un 5% de todo
el potencial que el posee.
La función principal del
Cerebro es la mente y ella, es la que nos conlleva al triunfo o al fracaso en
nuestras vidas. Cuando pensamos positivamente, alcanzaremos el éxito y cuando
pensamos negativamente se presenta una reacción a la inversa o contraria.
Por esta razón, si tenemos
un proyecto en mente debemos esforzarnos, ser constantes, perseverantes, tener
la voluntad y la disciplina de cumplir nuestros propósitos o metas; a pesar de
las adversidades que se puedan presentar en el camino.
En la vida los resultados no
se verán reflejados inmediatamente o fácilmente, debemos enfrentar muchas
circunstancias o adversidades, en donde
las cosas no saldrán como queremos, pero es precisamente esas reacciones,
las que nos impulsaran a seguir luchando por nuestro proyecto de vida. Además,
en este duro camino nos encontraremos con personas roba sueños, con personajes
que se asemejan a las pirañas, porque carcomen las buenas energías y las buenas
intenciones que posemos para nuestro futuro.
Por otra parte, en este
mundo hay tanta competencia, en el cual reina el individualismo y que cada
quien quiere salir adelante, sin importar pasar por encima de otras personas; se
hace presente la envida, el inconformismo, la falta de lealtad, la escases de
compromiso y de esta manera, hace mucho más difícil el camino al éxito, por
ende, debemos saber controlar las situaciones percibidas y así, contribuir a tener
todo bajo control, para evitar enfermedades, malos pensamientos y obtener la
tranquilidad que todo ser humano se merece.
Por esta razón, debemos
tener claro nuestro proyecto de vida, enfocándonos en quienes somos hoy y a
donde queremos llegar, teniendo siempre presente que las palabras tienen poder
y que uno es lo que piensa, tener presente que somos seres de mentes brillantes
y que no necesitamos de inteligencia, sino de voluntad, dedicación y esfuerzo,
para alcanzar nuestras metas propuestas.
Finalmente, siempre debemos
esforzarnos por lo que queremos, no esperar que desde el comienzo sea perfecto,
tener claro que con persistencia podemos cambiar nuestra vida y así, ser
exitosos. De esta manera, la confianza en sí mismo y la fe en Dios, nos ayudara a obtener lo esperado y lo que
queremos.
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